Real estate: quiénes son los 12 futbolistas que apuestan por las inversiones en edificios

La inversión en ladrillo se presenta como una opción atractiva para el resguardo de valor y la diversificación de inversiones de los deportistas de élite.

El mundo del deporte, especialmente el fútbol, se caracteriza por tener carreras profesionales cortas, con pocos jugadores llegando a jugar hasta los 40 años. Por esta razón, muchos buscan asegurar su futuro financiero más allá del campo de juego. Una opción cada vez más popular entre los deportistas argentinos es invertir en bienes raíces, y varios proyectos residenciales en Buenos Aires están captando su atención.

Un ejemplo reciente de este fenómeno es que 12 jugadores han comprado propiedades a una misma constructora, tanto en el barrio porteño de Caballito como en la zona de Las Cañitas. 

“Creemos que desde siempre el jugador de fútbol invierte en real estate, de cara a tener no solo un flujo de dinero para su retiro sino también un incremento de su patrimonio”, considera Mauro Bosque, director de Cacique, grupo desarrollador de dos emprendimientos en los que decidieron invertir los deportistas.

Entre los futbolistas inversores se encuentran Matías Zaldivia, que actualmente juega en el Club Universidad de Chile; Leandro Martín González Pírez, jugador de River Plate; Martín Nervo, defensa central del Atlas FC de la Liga de México; Juan Martín Lucero, actualmente en Fortaleza de Brasil; Diego Churin, delantero de Cerro Porteño; y Damián Pérez, jugador de Independiente.

“Los jugadores de fútbol profesionales buscan departamentos en zonas que les permitan generar una buena renta o inversión. Aunque, generalmente nos eligen para invertir, tenemos dos casos que compraron para vivir”, cuenta Bosque. 

Asimismo, según el experto los futbolistas argentinos eligen comprar en Argentina –incluso cuando viven en el exterior– no sólo como forma de inversión, sino “porque quieren tener un lugar para quedarse cuando vuelven del exterior”.

Dos edificios en los que eligieron invertir

En honor al cacique principal de las tribus Puelches que habitaban las Sierras del Tandil, en pleno Caballito se encuentra el edificio Ancafilú, ubicado en Aranguren al 1500. En este caso, la mayoría de los futbolistas compraron las unidades en pozo y, una vez entregado en agosto de 2023, las vendieron. Sin embargo, dos de ellos decidieron conservarlas: uno para destinarlo al alquiler temporal y otro para uso propio.

Con el 100% de las unidades vendidas, este emprendimiento de siete pisos cuenta con departamentos de un ambiente de 33 m², que se vendieron a US$75.000. En el último piso, el edificio tiene un tríplex con living comedor, cocina integrada y toilette en la primera planta, dormitorio en suite con vestidor y balcón en la segunda, más una tercera con terraza privada propia, este caso se comercializó en US$190.000.

No obstante, Caballito no es el único destino elegido por los futbolistas para invertir en el mercado inmobiliario. En el barrio de Las Cañitas, otro proyecto residencial ha captado la atención de cuatro jugadores: Juan Martín Lucero, Damián Pérez, Matías Zaldivia y Martín Nervo.

“Hace unos 20 años, la zona se posicionó como polo gastronómico, pero luego esa tendencia se trasladó a otros barrios. Hoy, es una zona residencial de alta gama, con proyectos muy interesantes para quien busca invertir para vivienda propia o para renta y sin dudas uno de los más seguros de la ciudad”, explica Pablo Nóbile, gerente comercial de la desarrolladora.

En pleno desarrollo se encuentra el edificio Aimará, ubicado en la esquina de Soldado de la Independencia y Tte. Benjamín Matienzo, que se entregará durante la primera mitad del 2026. Con el 70% de las unidades vendidas y aún 15 en comercialización, este proyecto cuenta con departamentos de uno a cuatro ambientes distribuidos en sus nueve pisos.

En cuanto a los precios, las unidades de un ambiente y 25 m² tienen un valor de alrededor de los USD 75.000; los de dos ambientes comienzan en los USD 126.000 y van desde los 36 hasta los 53 metros cuadrados; los de tres ambientes tienen entre 83 m² y 112 m², y se comercializan a partir de los USD 235.000; mientras que los de cuatro ambientes y 174 m² se venden por USD 440.000.

“El futbolista profesional busca un departamento en el que se sienta cómodo, no le importa pagar de más mientras sea una propiedad que le guste y se adapte a sus necesidades”, afirma Nóbile.

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